cantares y minutos

Sunday, June 25, 2006

Momento

Si la soledad hoy fuera sed
yo tendría los labios tan partidos
tan seca mi boca y amarga
concurrida con palabras
que se mecerían en la lengua,
intentando alcanzar el otro lado de los labios,
oscuras, parias, indigentes de la suavidad
Que debe tener la palabra de una mujer.
Estaría reseca la garganta y anudada
a la carne con pañuelos que limpian los besos
Del olvido.

Hay sombras en este cuarto que se dice cuerpo.
sombras taciturnas y tímidas que se defienden
Del día.
Por miedo a dejar de existir con el sol.
y me trago la sal, que se escurre por estos pensamientos
como si fueran el agua que baja por las sabanas
Que cuelgan de los cordeles.

tengo la locura que me galopa por el lomo
con esta soledad y esta sed
Que no se aplacan.
ni siquiera con la mano del amigo

Friday, June 23, 2006

el solo verbo

Tengo sed de libertad.
Yo que la niego,
En su otro nombre,
En su cara oculta.

Tengo hambre de mi silencio.
Yo que me escapo
Y lo llamo agonía,
Y le digo lágrima.

A mi...
Me surge el egoísmo
De saberme sola
Y de conjugar
El ser y el estar
En un solo verbo.

Friday, June 16, 2006

vieja sepultura de musgos

Cuando se describe a la muerte, no se tiene piedad de ella. Se la desnuda de la belleza, de las formas de la naturaleza y se la esconde en la pasion mas oscura de las noches.
Por qué?.
Ayer escuché a un futuro muerto no pedir por el cura, Nada hay en su vida hasta esos minutos para arrepentirse.
La muerte arrastra en el miedo y la fascinación, a las miradas mas lejanas, esas que van mas allá de las camas de los hospitales.
tengo miedo de morir, me dijo. pero jamas me perderia este único instante

Tuesday, June 13, 2006

trémula

Trémula,
sin mesuraDe flores blancas
Viste la sepultura.
Una mujer que de guerras
Se oxida en noches negras.
¡Qué paraíso de parásitos!
Tu manto de guirnaldas.
Tu mano cadavéricaQue se alza
En pinceles fosforescentes.
Y la noche?,
preguntas, Cuál de ellas,
la noche,La suma de todas ellas
Que a tu lado descansa.
Trémula y parásita la noche
Que te envuelve en guirnaldas blancas.
Tu mano cadavérica señala
La noche, todas las noches
La nada.